Fede fue la primera habitante del santuario, llegó siendo un pollito de sólo mes y medio. Fue rescatada de una «finca del horror» en la que los pollitos que nacían se utilizaban para alimentar a los perros. Allí le cortaron los huesos de las alas.Fede es una gallina de las que denominamos «broiler», cuyo destino en la industria es convertirse en «carne de pollo». Las gallinas como Fede han sido seleccionadas para engordar mucho en muy poco tiempo y con sólo 54 días son enviadas al matadero.
Esto hace que sea difícil que puedan llegar a adultas por todos los problemas de salud que se derivan de esta selección: sobrepeso, problemas en sus articulaciones y huesos, problemas del corazón, problemas respiratorios,etc. Fede ha tenido que hacer durante bastante tiempo rehabilitación en sus piernas para que estas sean capaces de soportar el peso de su cuerpo. Aunque a Fede le encanta comer, como a todas las gallinas «broiler», lleva una dieta especial para no subir de peso, algo que se vuelve bastante difícil en una gallina como ella. Pese a ser una galina destinada para consumo, Fede ponía huevos, unos huevos tan grandes que uno de ellos, de unos 8cm, le perforó el oviducto, por lo que tuvo que ser operada de urgencia; ahora necesita un implante hormonal cada 2 meses para que no vuelva a formar un huevo, ya que no tendría cómo expulsarlo.Le gusta pasar el día con su amiga Gleendy, una pata, y con Aisha, una gallina ciega.
Debido a la selección genética y al uso y explotación sufrido para la producción de huevos, Fede puede estar sufriendo y/o sufrir varios de los siguientes problemas:
Su esperanza de vida sin un implante es de 3 a 5 años, mientras que con un implante puede vivir hasta 8 años con una muy buena calidad de vida.
Es por eso tan importante que pueda tener acceso a su implante, porque sólo así empezará una vida en verdadera libertad.
¿Quieres hacerlo posible?
